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Aferrados a Messi

  • El Barcelona parece depender más que nunca de su gran estrella cuando ésta arrastra problemas físicos

Lionel Messi.

Lionel Messi. / quique garcía / efe

El agónico empate del Barcelona ante el Sevilla del sábado volvió a desnudar las carencias de los azulgrana sin su gran estrella, Lionel Messi, justo antes de afrontar el tramo clave de la temporada y a pocos días de recibir a la Roma en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones.

Si bien es cierto que el sueño de conquistar la triple corona de Liga, Champions y Copa del Rey sigue más vivo que nunca con el torneo liguero sentenciado y ya metido en la final copera, el juego del Barcelona ha comenzado a dar señales de alerta. Y es que aunque resulta obvia la influencia que un crack como Messi debe tener en el juego de su equipo, en los últimos tiempos el rendimiento del colectivo sin el argentino dista mucho de la autoridad y de la filosofía de juego que se le presupone al equipo catalán.

"¿Qué es el Barcelona sin Messi?", se preguntó el diario Marca en su edición online. Sport también habla de la "Messidependencia": "El Sevilla barrió al Barça durante 87 minutos pero desatendió la ley más infalible del fútbol: en un partido en el que juega Leo Messi, puede suceder cualquier cosa en cualquier momento, incluso cuando ya parece que no hay tiempo para nada".

Este sábado en Sevilla (2-2) se volvió a poner de manifiesto esa doble cara del equipo que dirige Ernesto Valverde: sobrepasado sin Messi, recibió dos goles que no fueron más por la mala puntería de los locales al definir contraataques, mientras que con él retomó el carácter, la agresividad y el gol, anotando dos en un minuto justo antes del final para rescatar un punto y mantenerse sin derrotas en 30 jornadas.

"Con y sin Messi todos los equipos son diferentes", admitió el técnico azulgrana tras el partido, en referencia también al España-Argentina de hace unos días en el que la albiceleste perdió 6-1 con el crack en la grada. Valverde se mostró orgulloso por la reacción del equipo, pero también dejó otro mensaje: "Deberemos revisar lo que ha pasado".

El delantero argentino comenzó como suplente por las molestias musculares que arrastra desde hace dos semanas y que ya le impidieron participar en los amistosos de su selección. Ante los sevillistas tuvo que ingresar para que su equipo mejorara en un partido que parecía totalmente perdido. El Barcelona empató de forma agónica, pero a Messi se le volvió a ver incómodo por sus dolencias en el muslo derecho.

En definitiva, el Barça parece depender más de Messi justo cuando el físico de su estrella atraviesa horas bajas, en un mes clave en sus aspiraciones de lograr el triplete y con el Mundial de Rusia 2018 ya en el horizonte, lo cual hace de las lesiones el mayor temor de cualquier internacional.

Sin embargo, la del argentino no fue la única baja sensible que el Barcelona notó ante el Sevilla. Sergio Busquets es el auténtico timonel y pulmón del equipo en el mediocampo y venía completando una temporada brillante hasta que cayó lesionado en los octavos de final de la Champions ante el Chelsea. El mediocentro español lleva su recuperación viento en popa y se cuenta con él para el miércoles en el duelo ante los romanos.

Como la de Messi, su buena recuperación será clave para ayudar el equipo a no caerse en el momento decisivo de la temporada y poder cerrarla con éxito.

Por otra parte, el mal juego ante los sevillistas dejó un señalado en la defensa: Samuel Umtiti. El zaguero central francés tuvo una actuación llena de errores y desconocida para el desempeño que venía acostumbrando. Y lo hizo justo después de una semana en la que copó los titulares de la prensa al negarse a confirmar su renovación con el club azulgrana, desatando rumores de todo tipo sobre su futuro.

El Barcelona recibirá a la Roma en el Camp Nou este miércoles en la ida de los cuartos de final de la Champions y seis días después, el martes 10, visitará el Olímpico de la capital italiana.

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