Provincia

La Junta retira la concesión turística al hotel Martín Alonso Pinzón

  • El establecimiento continúa abierto de manera irregular, mientras el sector hotelero demanda su cierre La empresa no reúne los requisitos para su explotación

La Junta ha cancelado del Registro de Turismo de Andalucía al establecimiento hotelero Martín Alonso Pinzón de Mazagón por irregularidades administrativas. El aparthotel permanece abierto mientras que la Delegación Territorial de Cultura, Turismo y Deporte ha incoado un expediente sancionador y el Ayuntamiento de Palos de la Frontera permanece en silencio.

El establecimiento hotelero ha quedado fuera del registro y debe cerrar sus puertas, ya que la empresa que lo explota no reúne los requisitos necesarios para seguir con la actividad. Al tratarse de un aparthotel, según el artículo 41 de la Ley de Turismo, la compañía debe controlar y gestionar el 90% de la unidad de explotación. El establecimiento cuenta con 80 apartamentos, por lo que, atendiendo a la proporcionalidad, debe administrar un total de 72.

Sin embargo, el pasado mes de marzo la empresa dejó de cumplir este requisito al finalizar algunos contratos con los propietarios y no renovarlos, por lo que perdió el control de la unidad de explotación que exige la Junta de Andalucía.

El pasado 19 de junio se produjo la cancelación en el registro turístico, que es firme desde el 25 de julio, después de que la empresa presentará un recurso fuera de plazo. Desde entonces, según la normativa andaluza no puede desarrollar ninguna labor turística.

Tres días después de la cancelación definitiva, un inspector de trabajo constató que el establecimiento hotelero continuaba abierto, incumpliendo así la ley, por lo que la Junta inició un procedimiento sancionador por clandestinidad contra el que la empresa ha presentado recurso, que no paraliza el proceso.

La Administración regional no tiene competencia para cerrar el aparthotel, acción que corresponde al Ayuntamiento de Palos de la Frontera para retirar la licencia de actividad a la empresa que lo gestiona, que fue quien la concedió. La Junta de Andalucía solo podría decretar el cierre en caso de que se produjeran situaciones de riesgos para la seguridad de los clientes y sanitarios.

El Consistorio palermo tiene conocimiento de la situación de ilegalidad del establecimiento hotelero, que podría recuperar la concesión para la actividad turística si vuelve a reunir los requisitos exigidos por la normativa en esta materia. De hecho, ha mantenido una reunión con representantes de la Asociación Provincial de Hoteles de Huelva y el sindicato UGT que representa a los trabajadores de las instalaciones hoteleras. Huelva Información ha contactado con el Ayuntamiento para conocer qué decisión va a adoptar, pero no ha obtenido hasta el momento ninguna respuesta.

La empresa ya tuvo problemas para alcanzar el 90% del cupo de explotación en 2010, pero logró superarlo y desde entonces funcionaba con total normalidad administrativamente.

Con esta nueva situación creada, la asociación de hoteles ha solicitado que se cumplan la ley y se proceda al cierre del establecimiento, porque "está funcionando de manera clandestina".

Según los hoteleros, la circunstancia actual del Martín Alonso Pinzón está dañando la imagen turística de la provincia de Huelva, a sabiendas de la empresa que "no concurren las condiciones para mantener el establecimiento abierto".

La asociación resalta que tanto la compañía como el Consistorio palermo tienen constancia desde hace meses de la situación irregular y hasta ahora no han emprendido ninguna acción para poner fin a esta anomalía.

Además del administrativo, el aparthotel cuenta con un problema laboral: los trabajadores llevan al menos dos meses sin cobrar. Según el sindicato UGT, no solo se está produciendo el impago de las nóminas sino que además se han cometido otras irregularidades con los empleados, relativas a las subrogación de los contratos.

El sindicato ha presentado varias denuncias en la inspección de trabajo por estos motivos y asegura que la empresa está empleando "ciertos métodos de difícil justificación para intentar que los empleados abandonen sus puestos de trabajo".

UGT denuncia que ni laboralmente ni jurídicamente" la compañía funciona bien y que lo "único que pretende es que el Fogasa se haga cargo de ellos", al tiempo que se están produciendo "verdaderas barrabasadas".

La central sindical alerta de la situación irregular en caso de accidente y recuerda que el colectivo de trabajadores ya mantuvo una huelga de hambre por sus condiciones laborales, y demanda a la inspección de trabajo que intervenga lo antes posible.

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