Frente a una situación paupérrima en términos macroeconómicos, el bote salvavidas lo sigue representando la exportación, que logra inyectar a la economía española 180.000 millones de euros. En este contexto, la empresa Agrícola El Bosque en Lucena del Puerto ha entendido siempre que el crecimiento empresarial pasaba por hacerse fuertes en los principales mercados europeos, y con esa filosofía optó en 1995 por especializarse y centrar sus esfuerzos en un campo entonces emergente como el cultivo de frutas del bosque y más concretamente en la zarzamora.

Dieciocho años más tarde de aquellos sólidos cimientos se levanta una firma capaz de comercializar 350 toneladas anuales de esta fruta, convirtiéndose así en uno de los principales productores europeos. Uno de sus socios, Daniel Velo, revela que su principal éxito radica que haber logrado la alquimia de romper la estacionalidad productiva de la zarzamora, cubriendo prácticamente todas las fechas del calendario y, primordialmente, "en los meses de enero, febrero y marzo en los que no tenemos competencia en toda Europa".

Velo explica que disponen de una estructura productiva que abarca una superficie total de 35 hectáreas, en la que se cultiva de forma hidropónica la zarzamora. A ello se añade una hectárea que cuenta con control de variables climáticas e incluso calefacción. En este sentido la empresa ha sabido poner los recursos que la la tecnología más puntera les ofrece a disposición de la sabiduría agrícola más ancestral, logrando aumentar el rendimiento y la capacidad productiva de las parcelas.

En efecto, la empresa lucenera se muestra orgullosa de su apuesta en materia de investigación, desarrollo e innovación. No en vano el objetivo último ha sido siempre la especialización en vez de una bifurcación de la producción. Velo explica que "muchas hortofrutícolas han querido diversificar introduciendo en sus procesos de producción la zarzamora, si bien los resultados no han sido los esperados por la especialización que requiere". Aun así, la competencia se ha erigido en un acicate para ser más competitivos, por lo que han aplicado una política de mecanización en pos de disminuir los costes de producción sin menoscabo de calidad del producto.

Gracias al esfuerzo de este tipo de empresas hoy por hoy Huelva es el primer productor de berries de España. Menos del 15% de la producción total de Agrícola El Bosque se destina al mercado nacional e incluso su exportación no se circunscribe únicamente al mercado europeo. Como revela el empresario lucenero, "hemos realizado misiones comerciales a Emiratos Árabes gracias a las iniciativas impulsadas por la Agencia Andaluza de Promoción Exterior (Extenda) y de la Cámara de Comercio en la feria Wob". En 2010 se iniciaron los primeros envíos, vía aérea, del primer contingente de fruta a Dubai, Kuwait, Bahréin y Qatar; mientras que ahora y gracias a los contactos realizados en Fruit Attraction 2010 hoy comercializan a países como Malasia, Indonesia y Singapur.

Para esta nueva expansión internacional la empresa se ha asociado a Frutas Remolinos, Hermanos Pulido y Agromartín para sumar recursos en las ferias logísticas y muestras de agroalimentarias donde cada empresa aporta un berrie en la que es especialista: fresas, frambuesas, arándanos y zarzamoras. Otro de los ejes estratégicos es emprender proyectos de investigación de nuevas variedades que permitan un ciclo de producción escalonado a lo largo del año, amén de ofrecer mejoras en su conservación y sabor.

Precisamente la empresa tiene abiertas dos líneas de trabajo en este campo. El primero de ellos se firmó en 2010 con la Facultad de Farmacia de la Universidad San Pablo CEU, el cual persigue la "mejora de la producción y del contenido en compuestos bioactivos de frutos mediante biofertilización en producción integrada". Se trata de pruebas que se realizan en los invernaderos de Agrícola El Bosque con los inoculantes proporcionados por el grupo de investigación Biotecnología de la Rizosfera de la Universidad. La segunda línea tiene como objetivo mejorar la producción de mora aumentando y estabilizando los niveles de compuestos bioactivos mediante el empleo de bioefectores. Traducido a un lenguaje más mundano no es más que la utilización de bacterias naturales que ayudan a potenciar las propiedades saludables de la fruta.

Agrícola El Bosque posee una plantilla indefinida de 28 trabajadores a los que se suman otros 70 eventuales en distintas fechas.