La Guardia Civil ha detenido a dos ciudadanos portugueses cuando intentaban vender en una chatarrería raíles que habían robado del trazado del ferrocarril minero en Huelva, justo en el momento en que los agentes inspeccionaban el establecimiento. Los detenidos son J.A.D., y A.R.D., a los que se imputan delitos de robo con fuerza en las cosas, según fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva.

Los hechos ocurrieron el pasado día 16 de febrero cuando los agentes realizaban una inspección en una chatarrería de la localidad de Moguer, conocida por ser un frecuente punto de llegada de metales.

Los guardias civiles se encontraban en el lugar realizando verificaciones de personas y mercancías y comprobando que los metales que llegaban al lugar fueran de procedencia legal y no fruto de pequeños robos.

En esas labores detectaron la presencia de una furgoneta de color blanco y matrícula de Portugal, que llegó hasta las puertas del recinto, por lo que indicaron a sus ocupantes a que abrieran las puertas del vehículo.

A bordo iban los dos hombres, que posteriormente quedarían imputados, y en el vehículo figuraban varios trozos de raíles de tren como mercancía para ser vendida en la chatarrería, en total nueve barras de hierro, cortadas para que cupieran en la zona de carga de la furgoneta, además de varios cajones repletos de tornillería para unir raíles, material que fue incautado. Según averiguó la Guardia Civil, tras indagar sobre la procedencia de los raíles, éstos habían sido robados en el antiguo trazado férreo que unía las localidades de Tharsis y San Bartolomé de la Torre.

Un responsable técnico del Ayuntamiento de la localidad minera presentó la correspondiente denuncia, mientras que la Guardia Civil instruyó las correspondientes diligencias que, en unión de los imputados, han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Moguer.

La vías de tren que unieron durante décadas las poblaciones mineras onubenses son de interés patrimonial, al formar parte del llamado legado inglés. En los últimos años los raíles de hierro están sometidos a desmantelamiento por parte de individuos que se dedican a vender la mercancía como chatarra, lo que ha sido denunciado en varias ocasiones por colectivos culturales relacionados con el legado inglés. Especialmente la vía de Tharsis ha desaparecido en buena parte, cerca de ocho kilómetros de vía, debido a esta práctica que las fuerzas de seguridad tratan de evitar, aunque muchas veces es difícil ya que los presuntos autores de los robos llegan bien preparados a lugares insólitos.