Provincia

"Nos duele que la sociedad no esté más al tanto de los progresos de la ciencia"

  • De los 35 años de trabajo del Instituto, el científico destaca los lazos de cooperación que se han establecido con organismos nacionales e internacionales · La crisis pasa factura a los proyectos

La Estación de Sondeos Atmosféricos del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) cumple 35 años. Desde 1996 se ubica en El Arenosillo, Mazagón. Su director el científico Benito de la Morena valora esta etapa.

-¿Cuáles han sido los principales proyectos e investigaciones de estos 35 años?

-Principalmente hemos pasado de la investigación atmosférica con cohetes, al estudio de la atmósfera mediante sistemas de observación terrestre que dan una garantía de calidad de la información obtenida. Si tuviera que destacar algo, incidiría en la multitud de cooperaciones nacionales y extranjeras que hemos establecido, esto ha facilitado el intercambio de datos, la elaboración de publicaciones conjuntas y estancias de personal investigador en instituciones de relieve.

-¿Y los de ahora?

-Las investigaciones se desarrollan en todos los ámbitos de la atmósfera, desde la radiopropagación de ondas por la ionosfera para su aplicación en las comunicaciones civiles y militares hasta la observación del ozono, radiación solar ultravioleta y contenido de aerosoles, cuya incidencia en la salud y medio ambiente es sobradamente conocidas, así como sus implicaciones en el estudio del cambio climático. Otra línea de influencia es la relacionada con la contaminación ambiental por gases y partículas que ha sido uno de los motivos de la reciente firma de un convenio con la Estación Biológica de Doñana. No debemos olvidar que El Arenosillo está dentro del Parque Natural y parece lógico que le dediquemos nuestro esfuerzo e interés.

-La capa de ozono aumenta y la amenaza del calentamiento global sigue su curso. ¿Ha tenido que replantearse la ciencia los principios sobre el cambio climático y su componente antropogénico?

-El ozono tiene un proceso evolutivo que lo marca el comportamiento antropogénico, es decir, la contaminación que genera el ser humano; pero también y muy especialmente la propia naturaleza con las erupciones volcánicas y otros fenómenos. Los procesos de recombinación para generar ozono de una manera natural suelen ser menos rápidos que los procesos de su destrucción y, como consecuencia, el ozono disminuye y aparecen los famosos agujeros en las zonas polares, con los consiguientes riesgos para la salud y el medio ambiente debido al incremento de radiación ultravioleta perjudicial para la vida y la biosfera.

El Protocolo de Montreal, que entró en vigor en 1989, ha pretendido eliminar las emisiones de gases que destruyen el ozono, por ejemplo: los cloro-flúor -carbonos CFC, entre otros. Con ello se ha disminuido significativamente la contribución negativa del ser humano en este proceso. Lo ideal sería que todos los países desarrollados lo cumplieran, pues la capa de ozono es el filtro protector de la vida del Planeta.

-Desarrollan una vasta labor en campos donde la opinión pública tiene un interés creciente como es la meteorología o la medición del ozono en la estratosfera, si bien me atrevería a decir que el 95% de la población desconoce que existe un INTA en Huelva y, menos aún, las campañas internacionales que se desarrollan. ¿A qué cree que es debido?

-Creo que es un problema de oferta y demanda. ¿Qué da más dinero, escuchar un programa científico de rigor o escuchar los cotilleos de algún personajillo del momento? La demanda social se orienta hacia temas donde la cultura y la ciencia, en general, ocupa un segundo plano y los medios de comunicación buscan el negocio que les permita mantenerse, algo lógico en lo económico, pero que perjudica a la difusión de la cultura. Baste un ejemplo como la ceremonia de los Premios Nobel, que ocupa unos escasos minutos en los telediarios, mientras que hablar de temas de corazón suelen disponer de horas y horas.

El INTA lleva en Huelva desde el año 1966 y haciendo ciencia, 35. Hemos recibido visitas de colegios, institutos de enseñanza y Universidades de dentro y fuera de Huelva en una proporción de 15 grupos por año. Colaboramos científicamente con numerosas Universidades españolas, europeas y en otros ámbitos internacionales, exponiendo nuestro trabajo en congresos y publicaciones científicas. Estamos donde debemos estar, no buscamos la imagen ni el protagonismo personal, pero nos duele que la sociedad no esté más al tanto de los progresos de la ciencia y la tecnología en todos los ámbitos del saber, pero creo que no es solo culpa del ciudadano.

-¿Cómo lleva la ciencia los estragos de la crisis con respecto a otros sectores económicos?

-La ciencia siempre ha sido, es y será la hermana pobre de los sistemas sociales instituidos. Quizás, porque es lenta, aunque segura; silenciosa, aunque deslumbre; oscura, aunque brille por su calidad; puede ser aparcada temporalmente, aunque sea necesaria. Los científicos sabemos trabajar con pocos medios, estamos acostumbrados a llorar en silencio; poniendo, incluso, nuestro dinero para conseguir medios que por las vías oficiales tardan mucho en lograrse. Ahora nos toca esperar. La pena es que la reducción de presupuestos afecta a los contratos de compañeros nuestros con gran experiencia que tienen en riesgo su puesto de trabajo y su continuidad, estos deberán irse al extranjero o buscarse otra alternativa. En cualquier caso, ello implica que abandonarán sus investigaciones y recuperarlas es casi imposible, por eso no se debe reducir en calidad científica.

-¿D e dónde llega el presupuesto para funcionamiento y para los proyectos de investigación?

-El Instituto aprueba la financiación que corresponde al salario establecido por la Ley en función de cada categoría. Los presupuestos de investigación se obtienen de subvenciones de los proyectos de investigación que proponemos a los denominados planes Nacional de Investigación y Plan Andaluz de Investigación y de operaciones comerciales con clientes diversos que solicitan de nuestros conocimientos. Las cuantías son variadas, pero le puedo asegurar que nuestro presupuesto es menor que el de cualquier equipo de fútbol de primera división.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios