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Especialistas en Juan Ramón piden que Fuentepiña sea residencia fija de poetas

  • Silvera propone un centro similar a la Fundación Gala de Córdoba · Ciria cree que la Junta debe tramitar de nuevo su protección · Cobos Wilkins y José Antonio García piden un esfuerzo conjunto de las instituciones

Conmocionados por el estado de abandono en el que se encuentra, y sorprendidos ante la pérdida de la protección patrimonial del que es sin duda "uno de los lugares más importantes de Andalucía y de la poesía universal", los especialistas en la obra de Juan Ramón exigen la recuperación de Fuentepiña, su custodia y puesta en valor a través de "un esfuerzo coordinado de las instituciones". Piden, además, un debate sobre el uso que se le debería dar, aunque la posibilidad de que albergue un centro artístico satisface a más de uno.

Es el caso de Francisco Silvera, coordinador del Trienio sobre el poeta. La intención del nuevo alcalde de Moguer, Gustavo Cuéllar, de negociar el alquiler de la finca con su propietaria, Elisa Hernández-Pinzón Pérez-Ventana, es, bajo su punto de vista, "un mal menor", ya que "la Junta de Andalucía debería iniciar cuanto antes un proceso de expropiación".

Así, aunque asegura que apoyará la opción del alquiler con tal de que la casa de descanso del poeta esté entre los lugares visitables de la ruta juanramoniana que Cuéllar quiere recuperar, opina que, además, Fuentepiña "debería tener una actividad permanente", siendo, por ejemplo, un "lugar de residencia estable para poetas ligado a la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA)". En su opinión, podría ser un lugar ideal de intercambio de estudiantes con la Universidad de Puerto Rico.

"Esta opción no es extraña, ocurre en muchos sitios. Pienso, por ejemplo, en la fundación que tiene Antonio Gala en Córdoba, donde se beca a gente joven para que estén allí durante un tiempo y hagan su obra de creación", explica. La fórmula gusta al investigador José Antonio Expósito, artífice del valioso rescate de algunos libros inéditos del poeta, ya que se trata de una alternativa "interesante". Pero, tal y como advierte, "tendría que ser concretada y desarrollada", al igual que las actividades que se proyectarían en ese espacio.

"Qué pena que a Juan Ramón se le tenga en ese olvido. Cualquier sitio de esa naturaleza sería un lugar de peregrinación y esmero. Esperemos que de nuevo Fuentepiña vuelva a donde debía estar; cuidada, protegida y, además, preparada para hacer lecturas, que es lo que debe ser", manifiesta.

En cualquier caso, Silvera recuerda que Fuentepiña es uno de lugares emblemáticos de la poesía universal: "Platero y yo es uno de los libros en español más vendidos del mundo y el más vendido -junto con El Quijote y La Biblia- en toda Hispanoamérica. Y ese libro que además acompaña a todos los demás libros de poesía y prosa de aquella época de Juan Ramón", se gestó en parte allí. Además, tal y como relata, Fuentepiña estuvo en la memoria del Nobel siempre, "incluso en los últimos días de su vida", de modo que es "vergonzoso" que esto haya tenido relevancia mundial y en cambio, "en Huelva no cojamos el toro por los cuernos".

Así, con la puesta en marcha de una residencia para creadores, más allá de la recuperación se pondría en valor un espacio que es "maravilloso" y que podría perderse ya no solo por el abandono de la casa, sino porque "la degradación del campo en el entorno es bastante grande en los últimos años".

La fórmula del alquiler sí satisface a José Antonio García y Carmen Ciria, coautores de la antología poética de Juan Ramón publicada en Everest, mientras que Expósito, ante la situación actual, la celebra.

García destaca la conexión de la finca con la obra del Nobel, lo que propicia que "no debe consentirse su situación tan lamentable", algo que "conmociona a cualquier juanramoniano que se precie". Por eso, considera que todo lo que sea apostar por la recuperación de ese espacio "siempre será poco".

Para ello, tal y como indica el escritor Juan Cobos Wilkins, se precisa y, sobre todo, "urge" un acuerdo. "¿Que no es fácil? Recuerdo que Juan Ramón dejó escrito: Mi reino está en lo difícil, comenta. Así, el que fue el creador de la Fundación Zenobia-Juan Ramón Jiménez y director de la Casa-Museo hasta 1995, valora que "un espacio tan entrañado en Juan Ramón Jiménez y tan entrañable en su obra debiera ser un gozo material, visitable por quienes peregrinan a los lugares juanramonianos".

Carmen Ciria, por su parte, lamenta la anulación de la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) por un fallo administrativo de la Junta, que no notificó en tiempo y forma a la propietaria el inicio de la tramitación. La especialista en Juan Ramón considera que la administración andaluza debe iniciar el proceso de nuevo para subsanarlo y que, de se modo, Fuentepiña vuelva constar como "un bien protegido".

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