La cuenta atrás para el edificio del Mercado del Carmen ha comenzado. El Ayuntamiento de Huelva anunciaba recientemente su intención de derribar el edificio este mismo mes y hoy dará los primeros pasos para hacer realidad ese anuncio con el vallado del inmueble como paso previo a su demolición. Una vez se ejecute el derribo, la vieja plaza de abastos dejará su sitio a un aparcamiento en superficie para 100 vehículos, a la espera del desarrollo del proyecto urbanístico que prevé la edificación de la futura plaza mayor de la ciudad.

El derribo será complicado, ya que en sus 144 años de historia el mercado ha sufrido diversas ampliaciones conforme crecía la capital con la mezcla de diversos materiales, con muros de ladrillo y cal, tejados de madera, columnas de fundición, chapas de zinc y una techumbre de uralita. Precisamente, la presencia de esta última añade dificultad a los trabajos, ya que las antiguas planchas de uralita contienen en su interior amianto, un elemento altamente cancerígeno.

Por ello, el desmontaje del techo del antiguo mercado se hará a mano para evitar la rotura de las planchas (que serán retiradas una a una) y que las fibras de amianto pasen a la atmósfera. Estas planchas serán trasladadas a un gestor autorizado tal y como se recoge en el plan de gestión de residuos que obligatoriamente ha tenido que elaborar la concesionaria del derribo (la misma empresa encargada de la demolición del antiguo estadio Colombino).

Además de esta prescripción, la actuación también deberá respetar otras medidas como la utilización de un sistema de riego continuo para minimizar el polvo, la limpieza diaria de las calzadas y espacios colindantes al mercado mientras duren las obras o la desinfección completa del lugar, incluido el subsuelo, las infraestructuras y redes de servicios enterradas.

Tras la demolición, la adjudicataria deberá acondicionar el solar (de unos 2.900 metros cuadrados), asfaltarlo y dotarlo de iluminación para su utilización como parking en superficie. La entrada al estacionamiento se hará por la calle Duque de la Victoria y la salida por la calle Barcelona.

Este aparcamiento dará lugar, en una fecha todavía por determinar, al desarrollo de un proyecto urbanístico que incluye la construcción de una plaza mayor porticada y dos plazoletas inmediatas, sobre las que se edificarán un máximo de 200 viviendas, comercios, organismos oficiales y lugares de ocio. En el subterráneo habrá un parking para 900 vehículos.