Los urbanistas de la revisión del PGOU constatan en su diagnóstico que Isla Chica, con 410,45 habitantes por hectárea, tiene una densidad de población "extremadamente" alta, una saturación que ha sido pasto de polémica durante muchos años con motivo de la reordenación de la zona del Estadio y el proyecto inicial de las 900 viviendas.

El lastre de esta suerte de sobrepoblación urbana se traduce en carencia de servicios comunitarios, déficit de equipamientos (con el ejemplo básico del centro de salud), zonas verdes y áreas públicas; problemas de aparcamiento, colapsos y un largo etcétera que bien conocen los residentes en la zona y que queda a expensas del equilibrio que aporte la reforma dotacional del Colombino y la Plaza Houston. Con un censo de más de 20.000 habitantes y casi 50 hectáreas de extensión, es sabido que esta barriada es, de hecho, una de las más saturadas residencialmente en el contexto de las capitales andaluzas; si bien el documento de información y diagnóstico del Plan General -basado en datos de 2006, sobre los que no ha habido grandes cambios en la ciudad- revela que hay otras cinco zonas consolidadas de Huelva que tienen excesivos niveles de población respecto a su superficie.

Isla Chica es un caso extremo, pero en esta órbita se encuentran también la barriada de La Hispanidad (271,81 habitantes por hectárea); El Matadero (271,15); La Orden (239,82) y Los Rosales (233,05); con las consecuencias derivadas para las futuras acciones de reajuste, fundamentalmente en cuanto a la previsión de dotaciones y servicios públicos.

Cinco barriadas, pues, que nacieron en un contexto anterior a las ratios, en función de las necesidades de la ciudad y condicionadas por el boom del Polo Químico, pero que en el momento actual rebasan la ratio marcada en la legislación urbanística para garantizar una gestión sostenible de los recursos urbanos.

En todas estas zonas se excede la proporción de 75 viviendas por hectárea, el límite normativo para los nuevos planeamientos. En este cálculo de densidad, los urbanistas suelen tomar el promedio de tres personas por hogar.

No obstante, al margen de estas barriadas existe un distrito que no sobrepasa ese umbral resultante de los 225 habitantes por hectáreas, pero que también registra una densidad de población calificada de "muy alta", como es el caso de la zona Centro. En este ámbito el censo ha crecido en torno a un 10% en el último lustro. Con casi 120 hectáreas de superficie [las mismas que se van a urbanizar en el Ensanche Sur], en el Centro de Huelva viven casi 25.000 personas, el 16% del total.

En esta cartografía que sirve de diagnóstico de las necesidades poblacionales, figuran como barrios de "densidad alta" Las Adoratrices y Huerta Mena (la zona entre Pío XII y el solar del estadio de Isla Chica). En un nivel inferior, se considera que tienen una proporción más ajustada entre residentes y superficie las barriadas de El Molino de la Vega; Las Colonias; el Polígono de San Sebastián y la urbanización de Santa María del Pilar.

Por debajo de los 100 habitantes por hectárea se encuentran La Navidad; Marismas del Odiel; El Torrejón; La Ribera; Pérez Cubillas; el Barrio Obrero y la zona del Conquero.

En conjunto, según este informe la ciudad tiene una densidad poblacional media, como hemos visto, con grandes desequilibrios por distritos.

En cuanto a la distribución porcentual del Padrón de habitantes, al margen de la zona Centro, las cuotas más destacadas son las de La Orden, donde viven casi 18.000 personas, el 12% del total; Isla Chica que representa el 13% de la población; y la zona de El Higueral-Los Rosales, con unas 14.500 personas, rozando el 10% del censo total.

Rozando una media de tres miembros por hogar, las zonas en las que hay un mayor número de familias numerosas son El Torrejón, el Polígono de San Sebastián y la Orden.