El Comité de Educación de Huelva de la Fundación Claudio Naranjo (FCN), engloba cada vez a más personas integrantes de la comunidad educadora. Prueba de ello es la celebración de unos seminarios que se desarrollan en los institutos Pintor Pedro Gómez y Fuentepiña, que dieron comienzo ayer y que se extenderán hasta el 3 de marzo.

El propósito de ello es la creación de comunidades educativas que acaben con el divorcio entre docentes y familias, en favor de una educación integradora.

Eva Fernández es docente del Pintor Pedro Gómez y una de los impulsores del Comité Claudio Naranjo en la provincia. Aboga por esa comunicación entre familias y docentes que acabe con ese divorcio que "se ha originado entre otros aspectos, por la pérdida de autoridad del profesorado y por una situación en la que al docente se le piden soluciones a problemas que lo rebasan y el profesorado hace un tanto de lo mismo con las familias".

Preguntada por el por qué de esta deriva, Fernández indicó: "El cierto caos que en la actualidad se vive en los centros docentes tiene su base en que no se respeta la diversidad; cuando se da diversidad hay posibilidad de conflicto si no se fomenta ese respeto".

El objetivo de la FCN es potenciar esas comunidades educativas en un mismo centro y que éstas sean integradoras: "Nuestra idea es ir a más y organizarnos en pequeñas comunidades de base educativa". La presencia de FCN en Huelva engloba en estos momentos, a más de 150 simpatizantes contándose con ocho personas en el comité organizador y doce colaboradores. El Comité de Huelva de la Fundación Claudio Naranjo dio sus primeros pasos en 2013. Desde entonces ha organizado de forma gratuita, varias actividades participativas como son conferencias en la Universidad de Huelva, encuentros entre profesionales de la educación, padres y madres o cine fórum entre otras iniciativas.

Apoyados en la filosofía promovida por el psiquiatra chileno Claudio Naranjo, expresada en su trabajo Cambiar la educación para cambiar el mundo, los integrantes de la fundación creen en una educación transformadora, avalada por el desarrollo de una educación integral y armónica que tiene en cuenta los aspectos intelectual, emocional, corporal y espiritual.

Desde la búsqueda de una educación integradora de mente, cuerpo y emoción, van formando los pilares para colaborar en la construcción de la escuela en la que creen.

La FCN valora profundamente la labor de los educadores, los cuales: "Creemos están expuestos diariamente a infinidad de emociones y toma de decisiones que en ocasiones no saben cómo gestionar".