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Pedro Sánchez promete infraestructuras para que Huelva sea "de primera"

  • El candidato socialista a la Presidencia plantea en Almonte un pacto nacional contra la violencia de género. Un ingreso mínimo vital y un salario mínimo de 1.000 euros, otras promesas.

El secretario general del PSOE en España, Pedro Sánchez, se comprometió ayer en Almonte a liderar un gran pacto político e institucional contra la violencia sobre la mujer. Esa era su propuesta destacada en las vísperas del día de lucha contra la lacra de la violencia machista en la primera y única visita que hará el candidato a la Presidencia del Gobierno a Huelva durante el periodo electoral. Junto a este planteamiento, traía una promesa para Huelva: su compromiso para traer las infraestructuras que necesita con el fin de que "sea una provincia de primera y no se segunda como la ha convertido el Partido Popular".

Sánchez se dio ayer un autentico baño de masas en la localidad onubense, donde recopiló en su discurso muchas de sus propuestas estrella: un ingreso mínimo vital, la subida del Salario Mínimo Interprofesional a los 1.000 euros, becas de estudio como un derecho inalienable y educación obligatoria hasta los 18 años y subida de las pensiones, amén de finalizar con el copago.

Un listado  de promesas que provocó el encendido aplauso del público en una plaza amiga, donde el partido ha ganado todas y cada una de las elecciones democráticas que se han desarrollado en el país. Ese apoyo y esa fidelidad incondicional a las siglas fue percibida por el propio Sánchez nada más desembarcar en la Villa. Allí fue recibido por el cabeza de lista al Congreso de los Diputados por Huelva, Juan Díaz Trillo; la alcaldesa, Rocío Espinosa; y el secretario provincial, Ignacio Caraballo, que hace escasas semanas estuvo en este mismo escenario con motivo del aniversario de la constitución de la Diputación Provincial, de la que es presidente.

En un teatro a rebosar y con la presencia de alcaldes, concejales, presidentes y representantes de mancomunidades, fundaciones y consorcios, el líder socialista se comprometió a reformar la Constitución no sólo para reconstruir la convivencia, sino también para blindar la sanidad y la educación; abriendo cauces de participación y recuperando el espíritu europeo  que, a su juicio, nunca debimos perder. Sánchez se mostró muy contundente a la hora de atizar la política desarrollada por Mariano Rajoy, aunque no hizo ninguna mención o diferenciación con partidos emergentes como Ciudadanos y Podemos.

De forma sucinta, Sánchez se refirió  a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, como ejemplo de gestión "esa con la que el partido ha demostrado su compromiso con los ciudadanos". No hubo mención a los atentados o la política exterior, ni al pacto antiyihadista, en el que PP y PSOE van de la mano junto con Ciudadanos.

Sin embargo, Sánchez censuró que "la derecha nos  haya dado lecciones de patriotismo cuando la patria está en las aulas, en la sanidad y en los derechos sociales" que -añadió- ha perdido la ciudadanía con las políticas del PP.  Previamente Rocío Espinosa había insistido en que no puede haber salida de la crisis económica si existen colectivos que se quedan por detrás. La alcaldesa también se comprometió a realizar una campaña puerta a puerta, casa a casa, en pos de ayudarle a ser investido presidente. 

Díaz Trillo puso Almonte como ejemplo de desarrollo sostenible en contraposición con un PP que "sólo habla del modelo de la especulación". Por su parte, Ignacio Caraballo se refirió a los motivos por los que, en su opinión,  el PSOE es referente en Huelva y cuenta con presencia en todos los pueblo es de España. El presidente de la Diputación señaló que necesitan a Pedro Sánchez al frente del Ejecutivo español para "echar de una puñetera vez al PP" y derogar la reforma de la Administración local. Por último, Caraballo apuntó que los populares han engañado a los agricultores y no han aprobado el trasvase de 14,9 hectómetros cúbicos antes de las elecciones.

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