Un fuerte y desagradable olor detectado en la tarde de ayer en diversos puntos de la capital onubense provocó que el Servicio 112 recibiera, alrededor de las ocho de la tarde, 120 llamadas alertando de la situación e interesándose por su origen, si bien los medidores de la Junta de Andalucía no detectaron incumplimiento de la normativa vigente.

Lejos de tratarse de un hecho aislado, el epsisodio se viene repitiendo con asiduidad. El precedente al de ayer tuvo lugar el pasado sábado 10 de octubre, pero una semana antes también se registró un nuevo episodio, con lo que han sido ya tres los que han alaertado a la población en menos de dos semanas.

De momento no se ha podido determinar con excatitud el origen y causa de los mismos, si bien la Junta está trabajando en un proyecto para tratar de esclarecerlos.

A raíz de la sucesión de episodios en los últimos años y de las reivindicaciones ciudadanas reclamando una solución contra los hedores, la Junta de Andalucía inició una serie de estudios que concluirán con la elaboración de un mapa de olores de la capital y su entorno, tal y como adelantó Huelva Información, con el que se quiere delimitar qué fuente o fuentes son el origen de los fenómenos de fetidez que padece periódicamente la ciudad para buscar soluciones al que es uno de los problemas ambientales que genera más quejas de la ciudadanía. La Administración contará no sólo con sus propios datos, sino que también ha reclamado la colaboración de las industrias.