Ni roja ni naranja ni verde. El Reglamento General de Circulación -publicado en el Boletín Oficial del Estado 306, de 23 de diciembre de 2003- sólo considera el azul como el color de la marca vial preceptiva para la zona ORA (Ordenanza para la Regulación de Aparcamientos) establecida en infinidad de municipios de España, incluidos la capital onubense y pueblos como Lepe, Ayamonte, Isla Cristina o Punta Umbría. El último apartado del artículo 171 de la normativa estatal deja claro que "las marcas que delimitan los lugares en que el estacionamiento está permitido, que sean de color azul en lugar del normal color blanco, indican que, en ciertos periodos del día, la duración del estacionamiento autorizado está limitada", sin contemplar ningún color más.

Automovilistas Europeos Asociados (AEA) ha realizado un estudio centrado en las 50 capitales de provincia del territorio nacional del que se desprende que 47 de ellas tienen áreas de aparcamiento de pago, de las que 35 "no cumplen la normativa e incorporan zonas de otro color, entre ellas Huelva". Así lo detalló ayer a Huelva Información el presidente de la AEA, Mario Arnaldo, quien enfatiza que "la única marca vial autorizada a día de hoy es la azul y son los ayuntamientos los que se han inventado las de otros colores, junto con las concesionarias, para recaudar más".

Recuerda, en concreto, una sentencia de 2005 por la que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) anuló la ordenanza del Ayuntamiento de la capital de España que establecía más colores para delimitar el estacionamiento de pago por horas. En ese dictamen judicial, indica Arnaldo, "se decía que el Consistorio se estaba autoatribuyendo competencias que no le vienen encomendadas, infringiendo el artículo 149 de la Constitución, que establece que las competencias en materia de tráfico son exclusivas del Estado". El tribunal dejaba claro en el texto que esta situación "puede vincularse a cualquier municipio" que pinte la zona ORA con otra señalización que no sea la azul, también a los onubenses.

A juicio del presidente de la AEA, lo lógico sería que los ayuntamientos interesados en atribuir cualquier otro color a las vías afectadas por esta medida "solicitaran al Gobierno que amplíe el Reglamento y elabore más modelos, pero es únicamente el Estado el que puede hacer esto, no los ayuntamientos".

Arnaldo mantiene que la señalización vial naranja, verde y roja de nuestra provincia es "ilegal" y que, por ende, "las sanciones que se impongan en esas zonas que no están delimitadas legalmente son nulas".

Alude además a la confusión que se genera en los conductores, que en San Sebastián, por ejemplo, se enfrentan a las zonas de color arena; o en Madrid, a las áreas bicolor azul-naranja. En esta última ciudad, además, se han incorporado los parquímetros inteligentes, "que te obligan a meter la matrícula, conectan con Tráfico y te cobran según el coche que tengas, la antigüedad, sus emisiones de contaminantes y la ocupación; además, según la demanda de aparcamiento que haya en una franja horaria determinada del día puede costarte más o menos estacionar, es como una especie de subasta", señala Arnaldo.

El colectivo nacional prepara un recurso que presentará a mediados de este mes ante el TSJM contra las ordenanzas que regulan el estacionamiento en la capital de España, "que todavía está en plazo para que los jueces puedan tumbarla" (dos meses tras la aprobación). No ocurre lo mismo en Huelva capital, por ejemplo, donde la ordenanza actual se aprobó en 2013 y ya no cabe "recurso directo contra ella". Tampoco contra la de Isla Cristina, modificada y aprobada en la sesión plenaria de febrero, ni contra las de Ayamonte, Punta Umbría o Lepe.

Teniendo en cuenta que el recurso directo no es posible en estos casos onubenses, desde Automovilistas Europeos Asociados proponen que se recurran las multas de forma individual. Primero, ante la administración competente en cuestión, señala Mario Arnaldo. Y luego, "si el ayuntamiento lo rechaza, en los tribunales".

Aquí entra en conflicto otro actor: las tasas judiciales. Porque cualquier conductor que no resuelva este asunto por la vía administrativa y pretenda hacerlo a través de un procedimiento abreviado, tendrá que abonar 200 euros aunque el montante que quiera recuperar sea inferior. Saldría, por tanto, perdiendo económicamente.

En territorio onubense, la ciudad de Huelva distribuye sus 3.409 plazas de estacionamiento regulado entre las zonas azul y naranja. En este caso, señala el presidente de la AEA, "la naranja sería la ilegal". Fuentes municipales indicaron a este respecto que la zona naranja se estableció "para favorecer al residente", agregando que la única ampliación que se ha acometido en la zona ORA "en los últimos diez años fue la de La Merced, y se realizó a petición de los vecinos". Las mismas fuentes indicaron que en el futuro se contempla la posibilidad de abrir bolsas de estacionamiento "verdes", con un precio estimado de 1,5 euros por 24 horas. Sobre la disparidad de colores viales, indican que "si un juez dice que es ilegal, las quitaremos". Mientras tanto, seguirá activa la naranja.

Otras localidades como Ayamonte (728 plazas) o Lepe (1.558 plazas) sólo tienen por el momento áreas con marcas viales azules y naranjas.

En Punta Umbría y en Isla Cristina las últimas ampliaciones de la zona ORA han levantado ampollas. El primer municipio cuenta con 4.389 plazas reguladas; el segundo, con 3.900. Ambas rebasan en plazas a la capital pese a que su padrón es minúsculo en comparación con el de Huelva. En estas dos localidades el aparcamiento de pago lo gestiona Iberpark y, más allá de las zonas naranja y azul, la paleta multicolor incorpora además el verde y el rojo.

Este diario contactó ayer con el Ayuntamiento de Isla Cristina, solicitándole una reacción a la denuncia pública de Automovilistas Europeos Asociados, sin que proporcionara una respuesta.