Huelva

La lista de espera sanitaria enfrenta al SAS y a la plantilla del Blanca Paloma

  • La Junta desmiente que exista una base de datos fantasma, como denuncian los empleados El comité de empresa inicia una campaña de información al ciudadano

El comité de empresa del hospital concertado Blanca Paloma denuncia que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ofrece datos "irreales" sobre los plazos de respuesta quirúrgicos y asistenciales, maquillando las listas de espera publicadas en los canales oficiales con "trucos informáticos" que le permiten esquivar los periodos legales establecidos en los decretos autonómicos 96/2004 y 209/2001: un máximo de 60 días para la primera consulta del especialista, de 30 días para una prueba diagnóstica, de 120 días para la cirugía más común y de 180 para operaciones más complejas.

La presidenta del comité del centro concertado, Charo Borrallo, indicó ayer a Huelva Información que existe una suerte de limbo informático, "una base de datos de pacientes paralela" a la oficial de la que no computa el tiempo de espera transcurrido una vez que los datos del usuario se incorporan a los sistemas Diraya (especialidades) y AGD (intervenciones quirúrgicas).

Según la representante de los trabajadores del Blanca Paloma, cuando un paciente asiste, por ejemplo, a su médico de cabecera y éste determina de que es preceptiva su derivación al especialista, "incluye la solicitud y los datos del enfermo en la base virtual Diraya", pero si el cupo se ha excedido, el profesional "se encuentra con una agenda cerrada en la que no puede incluir al paciente y, por tanto, no puede darle la cita". Charo Borrallo afirma que, entonces, esa información del usuario se trasvasa a otra base de datos general cuyo contenido se volcará definitivamente en la agenda una vez que quede espacio libre en la misma. "Por eso hay esa demora tan tremenda y los enfermos saben que los plazos no se cumplen, lo ven cada día con sus casos", remarca la sanitaria, a la vez que sentencia que la Junta de Andalucía "tiene las herramientas para falsear los datos".

La Delegación Territorial de Salud en Huelva, por su parte, calificó como "tajantemente falsas" las manifestaciones de Borrallo, aclarando que "los datos son públicos y no existe nada paralelo". Un portavoz de la Junta evidenció, siguiendo con el ejemplo anterior, que "cuando un médico de familia se encuentra con la agenda cerrada para el especialista, las citas se reasignan desde el propio centro al que se le hace la petición", en este caso, el hospital de referencia donde se encuentra el especialista.

Los empleados del hospital de José Manuel Pascual en Huelva, pese al desmentido de la Administración pública, se mantienen firmes en su versión y pretenden acercarla a la ciudadanía. Con este objetivo iniciaron ayer una campaña informativa para demostrar, además de la supuesta existencia de la lista de espera fantasma, "que por las presiones de la jerarquía a los profesionales del SAS no se están incluyendo todos los enfermos ni en el sistema Diraya ni en la AGD". A todo ello suman un propósito más: "Descubrir el posible amaño de las listas de espera desde el Servicio de Atención a la Ciudadanía del SAS y con ello las listas de espera reales".

La iniciativa pretende llevar esta información a todas las localidades onubenses a través de "los ayuntamientos, los partidos políticos y los sindicatos que quieran adherirse a ella", pero también han dispuesto dos números de teléfono ( 959 01 21 24/ 82) para informar a los ciudadanos sobre sus derechos. En este punto, Charo Borrallo explicó que en el momento en que un paciente ve que se excede el tiempo de espera establecido por decreto "debe ir con el documento que le da su médico de cabecera o el especialista a la Delegación de Salud y poner una reclamación".

La presidenta del comité denuncia, paralelamente, que desde finales de año "apenas nos llegan pacientes pese a la prórroga unilateral del concierto". Tanto es así, dice, que "nuestra alergóloga está llamando directamente a los pacientes para darles citas porque está de brazos cruzados, cuando esa especialidad es de las más demandadas en Huelva". Desde que comenzó este "calvario", el hospital ha despedido a 60 empleados "por falta de pacientes". La Junta de Andalucía rebatió ayer este argumento, señalando que "ya se está derivando al Blanca Paloma el mismo volumen de pacientes que antes".

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