El proceso de fusión entre los hospitales Juan Ramón Jiménez e Infanta Elena -lo que ya se viene en llamar Complejo Hospitalario de Huelva- entra en su etapa final con el enfado de las dos juntas de personal, que denuncian haber asistido a este proceso como convidados de piedra ya que denuncian que no se les han mantenido informados de nada.

Tras algo más de tres años desde que se inició la conocida como alianza estratégica entre ambos hospitales, los representantes de los trabajadores siguen hablando de oscurantismo por parte de la dirección-gerencia que ya comparten los dos centros sanitarios.

El presidente de la junta del Juan Ramón Jiménez, Antonio Pérez Falcón, adelantó que el martes mantendrán una reunión con el gerente "para conocer el estado actual de las obras que se vienen realizando" e hizo referencia al oscurantismo con que la fusión se está llevando a cabo , de modo que "casi siempre nos enteramos por la prensa". Pérez Falcón dijo no entender esa actitud de la gerencia: "Si está tan seguros de que el proceso es lo mejor, no entiendo porqué no cuentan con la parte social", añadiendo que "no queremos entorpecer lo que se está haciendo, pero sí tener información sobre temas como el traslado de personal".

Desde la junta del Infanta Elena se expresan usando casi los mismo términos. Su presidenta, Sara Rodríguez, indicó que "ni siquiera se reúne con los delegados de Prevención y eso debe hacerse por ley". Reiteró la representante de los trabajadores del Infanta que "no nos informan de nada; ni siquiera nos envían una carta"; de ahí que la junta le haya surcado una invitación con la confianza de que se presente; en caso negativo "habrá que tomar medidas".

El Sindicato Médico (SM) de Huelva también se ha hecho eco del malestar de los trabajadores, indicando que "el proceso de fusión de los hospitales se está realizando con una absoluta falta de transparencia (sin tener en cuenta a los trabajadores ni a sus representantes) y con el único objetivo de reducir el gasto, y en detrimento de la calidad asistencial". Para este sindicato, el Infanta Elena quedará como un hospital para crónicos y terminales y sin apenas especialistas: sin ginecólogos, sin pediatras, sin cardiólogos, sin neumólogos, sin dermatólogos, gastroenterólogos... Toda la atención quedará en manos del Servicio de Medicina Interna integrado cada día por una plantilla menor", señala el SM en una nota informativa.

Por lo que respecta a la futura Área Materno-Infantil del Juan Ramón Jiménez, que absorberá la actividad que efectúa el Infanta Elena en ese ámbito, siguen las obras de ampliación que, más que previsiblemente, acabarán a inicios del próximo año.