La provincia de Huelva se sitúa en la zona de mayor incidencia de fallecimientos de todo el país, mostrando porcentajes por encima de la media nacional y situando, la mayor parte de sus municipios, entre el 10% de los que están en peor situación de toda España.

Así se señala en el Atlas de Mortalidad de España 1984-2004, realizado por 25 investigadores, coordinados por los profesores de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona Joan Benach y José Miguel Martínez y que ha sido editado por la Fundación BBVA. El trabajo completa al anterior atlas que comprendía el período 1987-1995 y tiene un carácter meramente estadístico sin establecer una relación causa-efecto.

Si en el primer atlas, la tasa de mortalidad onubense era un 25% mayor que la media nacional, el nuevo informe indica que, en el caso de los varones, esa cifra está por encima en un 24,57% y en un 16,17% en el de las mujeres. La media estaría en un 20,3% lo que supone un descenso notable, aunque el dato de la última edición del atlas hace referencia solo a la capital. Todos los municipios más importantes de la provincia están en el 10% del grupo nacional de los que se encuentran en peor situación, salvo algunos como Valverde o Almonte, en el caso de las mujeres que registran porcentajes más favorables.

El atlas incluye las 17 causas más frecuentes de mortalidad. La zona sur del país es donde se produce la mayor parte de fallecimientos, de hombres y mujeres, por todas las causas analizadas, especialmente como consecuencia de las enfermedades cardio y cerebrovasculares, hipertensivas o por diabetes.

En las mujeres, la mayor mortalidad se sitúa en el suroeste: Sevilla, Cádiz y Huelva; en hombres se repite esa misma localización. Si Galicia y Asturias son las zonas en las que se produjo la mayor parte de las muertes de hombres menores de 65 años, lo mismo ocurrió en Cádiz, Huelva y Sevilla con los varones a partir de esa edad. El trabajo sobre mortalidad en España permite comprobar los datos a nivel municipal. De todas las localidades escogidas de entre las más importantes de la provincia, la que muestra los mejores datos es Valverde del Camino, aunque tampoco se aparta del furgón de cola de la peor situación española en lo que respecta al nivel de fallecimientos. Valverde, en el caso de los varones, sólo rebasa la media nacional, en un 8,3% y un 2,54% en el caso de las mujeres. Son porcentajes muy alejados de los de la capital (24,5% y 16,17% respectivamente) o de los de Isla Cristina, con un 35,2% en el caso de los hombres y un 20% en el de las mujeres. Por encima de la capital también se encuentran Moguer y Almonte y por debajo, Aracena. La buena noticia es que en todos los municipios se perciben descensos paulatinos de la mortalidad.

Atendiendo a patologías concretas, el trabajo dirigido por Joan Benach señala que, a nivel general, las enfermedades cerebrovasculares fueron la primera causa de muerte en las mujeres (14,9%) y la segunda en los hombres (9,4%), así como que la patología isquémica del corazón fue la primera causa de fallecimiento en los varones (11,5%) y la segunda en las mujeres (9,4%).

El Atlas de Mortalidad de España 1984-2005 indica que, en lo referente a la patología isquémica, Huelva se sitúa en la zona de alto riesgo. Tanto en los hombres menores de 65 años como en los hombres mayores de 64, aparece un patrón geográfico similar a la mortalidad total destacando muy especialmente, las provincias de Cádiz, Huelva, Sevilla, Badajoz y Murcia. La mortalidad para la enfermedad isquémica del corazón está actualmente en un nivel ligeramente inferior al del inicio del periodo de estudio, habiendo experimentado un aumento hasta 1993-1995. Las mujeres tampoco se salvan a la hora de compartir esta zona de alto riesgo.

En lo que respecta a las enfermedades cerebrovasculares, principal causa de fallecimiento entre las mujeres, Andalucía occidental es también zona especialmente sensible a su incidencia, aunque la mortalidad es también descendente. En el caso de los varones, Huelva está en el área de mayor mortalidad aunque también se evidencia una tendencia descendente.