El perito judicial Luis Enrique Hellín, que ha intervenido en la investigación del teléfono móvil del único acusado de la muerte de los hermanos onubenses Ruth y José, José Bretón, prefiere guardar silencio por el momento y no pronunciarse sobre la investigación periodística publicada este domingo en el diario El País, en la que se le identifica como Emilio Hellín Moro, el ultraderechista militante de Fuerza Nueva que asesinó a Yolanda González en 1980.

Huelva Información contactó ayer con el experto informático, que prefirió no confirmar ni desmentir si la publicación es veraz. "Está todo en manos de mis abogados", sentencia. No obstante, Hellín Moro sugiere que "las cosas no suceden por que sí, por las buenas", matizando que "sacar ahora algo de hace 33 años atiende a algún interés, es una información interesada".

Hellín Moro dirige desde 1998 la empresa New Technology Forensics, dedicada a prestar sus conocimientos -de primer nivel- en ingeniería informática y de telecomunicaciones aplicadas a la investigación forense a particulares, juzgados e, incluso, al Ministerio del Interior, que reconoció el lunes que contrató sus servicios en los años 2006, 2008, 2009, 2010 y 2011 para cursos de especialización a agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil.

Las actividades de esta sociedad limitada, que también tiene delegación en Huelva, "hoy en día son reclamadas tanto a nivel nacional como internacional por universidades, departamentos de criminalística de cuerpos policiales, por el Poder Judicial y prestigiosos despachos de abogados", indica la empresa en su página web.

La familia de Ruth y José encargó a New Technology Forensics el análisis en profundidad del teléfono móvil de José Bretón. El resultado de las indagaciones de Hellín y los suyos figura ahora en un completo informe que ya está en manos del instructor de la causa, el magistrado cordobés José Luis Rodríguez Lainz. El minucioso trabajo de la empresa ha permitido establecer una cronología de todos los movimientos del presunto autor del doble asesinato y recuperar datos que habían sido borrados del terminal aquel fatídico 8 de octubre de 2011.

Hellín Moro es un hombre calmado, que habla con tono pausado y amable. Es discreto. Cuando este diario contactó con él para conocer datos sobre la investigación del móvil de Bretón el pasado septiembre, no quiso que su nombre apareciera como fuente en la información titulada: "Bretón desconectó su móvil el 8 de octubre sin saber que se mantenía activo", alegando que estaba involucrado en diversas investigaciones de gran calado, entre ellas, algunas de la Audiencia Nacional en las que había etarras imputados. "Quiero ocultar mi nombre por motivos de seguridad, entiéndame", subrayó entonces. Luis Enrique Hellín Moro (Emilio, según el periódico de tirada nacional), tampoco figura en la web de la empresa que dirige, en la que sí están reflejados los nombres de sus trabajadores, entre ellos uno de sus hijos, Juan José Hellín, guardia civil de la Policía Judicial y militar de carrera experto en Psicografología, Pericia Caligráfica y Documentoscopia.

Otro asunto de envergadura vincula al perito con Huelva, el relacionado con Valverde del Camino. El Ayuntamiento de la localidad aclaraba el martes que contrató "por una vez y mediante un contrato menor de asistencia técnica ya finalizado" a la compañía de Hellín, pero que no realiza "una investigación pormenorizada de los antecedentes penales ni de la filiación política de los trabajadores o colaboradores de las empresas a las que contrata, al igual que el resto de administraciones públicas o empresas particulares que contratan este tipo de servicios". El objetivo de la contratación, una investigación interna para auditar y aclarar "las grandes irregularidades detectadas en la última etapa del gobierno socialista, tanto en el Ayuntamiento como en la empresa municipal de la vivienda (Givsa)", indicó el Consistorio.

Por su parte, el secretario de Organización del PSOE de Huelva, Jesús Ferrera, acusó a la alcaldesa valverdeña, Loles López, de "espionaje político", al tiempo que pidió al presidente del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido, que explique si ésta es una "práctica habitual entre los dirigentes de su cúpula, espiar a políticos del PSOE". El dirigente socialista quiere saber por qué se investigó el ordenador del secretario general del PSOE de Valverde, Pedro Domínguez.