Sabor agridulce en el Consejo de Hermandades, que ayer obtuvo el "no" definitivo a su propuesta de celebrar, con motivo del Año de la Fe, un Santo Entierro Magno para la jornada del Sábado Santo. El presidente de esta institución cofrade, Antonio González, se reunió ayer con el obispo de Huelva, José Vilaplana, a quien presentó de forma oficial la propuesta después de que fuera aprobada por mayoría en el pleno de hermanos mayores que tuvo lugar el pasado lunes.

González -que acudió a la reunión junto al vicario Diego Capado, el hermano mayor del Santo Entierro y el vicepresidente del Consejo de Hermandades, Jesús Rodríguez- destacó al término de la misma que, aunque Vilaplana no dio su autorización para esta celebración extraordinaria del Sábado Santo, abrió la puerta a una iniciativa similar que podría celebrarse otro día, de forma que, por ejemplo, "no descarta la jornada del Viernes Santo".

"Nos ha dicho que no al Sábado Santo, pero no a una procesión magna. Le ha encantado la exposición que hemos hecho y el propio proyecto, aunque no le ha gustado el día escogido porque, según nos ha explicado, en Huelva no se ha hecho nada parecido en 60 años y precisamente él no quiere abrir esa puerta que no ha abierto ningún otro obispo de la Diócesis", aseguró González.

Sin embargo, el obispo se quedó con el proyecto y se comprometió a estudiarlo detenidamente para ver "qué se puede hacer para otra fecha o para otro año". Con este objetivo (encontrar una fórmula o una efemérides apropiada que en el futuro posibilite que todos los pasos salgan a la calle en procesión), las partes se reunirán próximamente.

El responsable del Consejo de Hermandades valoró las "flores" y el ánimo que, según aseguró, el obispo profirió a los hermanos mayores y a las hermandades, cuya "impresionante labor" destacó durante el encuentro, en el que Vilaplana se preocupó por trasladar sus motivos a los presentes de forma que éstos entendieran que su decisión no responde a un ánimo anticofrade.