El servicio de sanidad exterior de la Subdelegación del Gobierno de Huelva, que incluye el centro de vacunación, ha lanzado un mensaje de recomendación para obtener información sobre las vacunas necesarias en el caso de que se vaya a realizar un viaje a algún país que lo requiera o que esté en vías de desarrollo. En este sentido, desde el servicio se ha notado, quizás por efectos de la crisis, un descenso aproximado de un 30% en los últimos años de las personas que se vacunan para realizar algún viaje de placer.

En una entrevista, la jefa de servicio y médico de sanidad exterior de la Subdelegación onubense, Mar Faraco, destacó no obstante que este descenso se ha visto compensado con el aumento de personas, sobre todo procedentes de Mali -donde para viajar es obligatorio vacunarse para combatir la fiebre amarilla-, que vienen a Huelva a trabajar en las campañas agrícolas, núcleo que ha aumentado en un 30% las peticiones de vacunación respecto a los últimos tres años y que supone un tercio de los viajeros que requieren estas vacunas.

Estas personas que años anteriores permanecían en la provincia en el intermedio de las campañas "ahora se van a su país porque es más barato vivir" en este espacio de tiempo, por lo que requieren la vacuna.

Otro de los grupos que ha aumentado es el conformado por los nacionales que buscan en otros países la posibilidad de trabajar o que han sido destinados por sus empresas a países de la zona de América del Sur, del sudeste asiático o de África. En este colectivo sí se ha notado un ascenso en el centro, que en estos momentos por obras se encuentra ubicado en la propia Subdelegación y que cuenta con dos médicos y dos enfermeros.

En Huelva, según explica Faraco, unas 1.200 personas al año piden información respecto a algún tipo de vacuna. Así, unas 700 son inyectadas en el centro de vacunación a un precio de 18,25 euros, y al resto recomiendan que se la pongan fuera del centro, a través del SAS con la receta médica, cuyo precio oscila dependiendo de la situación de cada persona.

En concreto, en 2012 por el momento han solicitado información 582 viajeros, de los que 301 se han vacunado, pautando además 360 tratamientos antimalaria.

El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ofrece una información en su web relativa al consejo de vacunarse antes de emprender un viaje a un país en desarrollo, donde indica las vacunas que hay que inyectarse dependiendo de la zona a la que se desea viajar y las enfermedades que pueden transmitir vectores que viven en esos países.

En cuanto a los tipos de vacuna que proporciona el centro de vacunación, Faraco ha detallado varias, entre las que se encuentran las más comunes como son la vacuna contra la fiebre amarilla, para viajar a África, concretamente a Mali, o las profilaxis contra la malaria, principalmente si se viaja a países tropicales.

Pero hay otros tipos como la vacuna contra la encefalitis por garrapatas para viajar a algunas zonas de Europa, como el sur de Alemania. También se inyectan, aunque en menos ocasiones, la vacuna contra la rabia, contra la encefalitis japonesa, la meningitis tetravalente o la polio, mientras que las que se suelen poner en el centro de salud son las vacunas contra el cólera, la fiebre tifoidea, la hepatitis A y B o la de tétanos, entre otras.