El recién investido presidente de la Diputación Provincial, Ignacio Caraballo (PSOE), ha comenzado ya a situar a sus afines en los puestos claves del organismo. El primero en llegar es el actual alcalde de Manzanilla, Cristóbal Carrillo, un socialista del Condado de Huelva de la máxima confianza del nuevo presidente. Ayer mismo, el Consejo General del Consorcio Provincial de Bomberos, donde están representados los 75 ayuntamientos que lo integran y la Diputación, celebró un pleno ordinario con el objeto de conformar la nueva estructura. Y en ese organigrama Carrillo ocupa un lugar de privilegio después de que Caraballo firmara un decreto por el que delega las funciones de la presidencia del Consorcio en el alcalde de Manzanilla.

En los próximos días, el presidente de la Diputación irá confirmando las piezas de su nuevo organigrama, desde el portavoz del equipo de Gobierno y portavoz hasta los titulares de los departamentos que antes nombró Petronila Guerrero.

Está por ver si Caraballo da un giro a la Diputación después de que Petronila Guerrero diseñara una institución con la proa puesta en la Alcaldía de Huelva. El también secretario de Organización socialista suele mirar más a los pueblos, comarcas y mancomunidades que su predecesora en el cargo. Con Guerrero ganaron peso en la Cámara provincial los representantes del Partido Judicial de Huelva en detrimento de los pequeños municipios.

Precisamente de ahí llega Carrillo, de Manzanilla, uno de los pueblos más pequeños del Condado que ha sufrido la lacra del paro en estos años de crisis.

El siguiente paso ahora será el pleno de toma de posesión del suplente de Petronila Guerrero, Alejandro Márquez, también concejal en el Ayuntamiento de Huelva.

Una vez conformado el nuevo plenario, Caraballo convocará el Pleno de presupuestos, que será uno de los más tardíos de los últimos años.

También queda por resolver la distribución de asesores, ya que varios de ellos fueron nombrados directamente por Guerrero.

La celebración del Pleno de investidura de Caraballo en Moguer, el pueblo de Mario Jiménez, el secretario general del PSOE de Huelva y portavoz parlamentario, confirma otro de los giros políticos en la institución en los últimos años: la pérdida de influencia de los socialistas de Valverde del Camino y la conformación de un nuevo núcleo, ya se verá si exitoso, a la orilla del Tinto.