El coordinador del Pacto Nacional por el Derecho a Decidir, Joan Rigol, ha asegurado que las entidades promotoras han constatado su "compromiso" de "trabajar unitariamente" para que la nueva consulta del 9-N sea una "gran movilización", aunque ha subrayado que "unidad no significa uniformidad". "Nos comprometemos a trabajar unitariamente para que el 9-N, pese a sus limitaciones, signifique una gran movilización de nuestro pueblo y, así, el voto emitido y otras formas de movilización refuercen el sentido participativo de los ciudadanos en este proceso", señala el documento acordado, presentado por el ex presidente del Parlamento catalán en rueda de prensa.

La cuarta reunión del Pacto ha concluido pasadas las 14:00, tras más de dos horas, y ha estado presidida por Artur Mas, y han acudido también la presidenta de la Cámara, Núria de Gispert, los consejeros Francesc Homs y Joana Ortega, y los líderes de los partidos proconsulta y entidades de la sociedad civil.

El texto consensuado por las 57 entidades presentes consta de cinco puntos en los que, además de las bases del pacto, se incide en el "pluralismo político y la coordinación entre política y sociedad civil", la "unidad" de cara al 9-N, el Derecho a decidir como "punto de consenso" y también la "corresponsabilidad" con las asociaciones adheridas al Pacto con vistas a la consulta alternativa. Así, se afirma que es una "exigencia democrática" del pueblo catalán exigir su derecho a decidir". "Somos una Nación y, como tal, tenemos este derecho sobre nuestro futuro político. Y queremos ejercerlo con diálogo y civismo", añade.

Un ejercicio de este derecho "imprescindible" para afrontar los "problemas reales" de los catalanes, tanto de orden social y económico, como en la defensa del Estado del bienestar, en el reforzamiento de la "exigencia" en el campo educativo y cultural, además para "reafirmar la capacidad de integración de todos los que viven y trabajan en Cataluña".

Rigol ha destacado que la reunión ha servido para "visualizar" la unidad de sus entidades y del "eje político", desde el pluralismo y la diversidad, para desvanecer "ciertas nubes", tras el desencuentro dentro del bloque soberanista de los últimos días. "He visto unidad en los partidos, que no es uniformidad, sino unidad desde el pluralismo en el que hay sensibilidades distintas, pero siendo todos capaces de acordar el objetivo inmediato -el 9 de noviembre- para trabajar conjuntamente", ha dicho Rigol. En este sentido, ha explicado, las entidades han llamado a centrar los esfuerzos en el 9-N para que sea un "éxito" y, posteriormente, ir hacia una "coordinación más profunda" de todo el proceso soberanista, aunque ha insistido en que no se ha planteado en ningún momento un adelanto electoral.

Sobre el hecho de que, además de "reforzar" el 9-N, se haya incluido en el documento "otras formas de movilización", tal como reclamaba ICV-EUiA, Rigol ha matizado que no se ha concretado su formato, pese a que este grupo pedía una recogida de firmas, para llevarlas ante las instituciones europeas, en la que se denuncie que el Gobierno ha vetado la consulta acordada inicialmente. El coordinador del Pacto ha reconocido que las entidades "han lamentado" que no se celebre la consulta tal como estaba prevista en el decreto de convocatoria, aunque, según él, se ha evitado en gran medida el tono "crítico" durante la reunión para centrarse en "propuestas constructivas".