De la calma chicha a la satisfacción y casi la euforia. Ésa fue la evolución ayer en la sede del PP. La jornada comenzó tranquila, porque no se esperaban muchos cambios en los resultados de la provincia. Todos apostaban al 2-2-1, mismo reparto de diputados que el logrado en las elecciones del 20 de diciembre. La tranquilidad reinaba al principio en la sede popular, fruto también de la amplia experiencia en citas electorales, ésa que dice que hasta las 22:00 no empiezan los resultados fiables. Más inquietud había sobre si finalmente la coalición Unidos-Podemos lograría el sorpasso al PSOE, sobre todo tras los sondeos a pie de urna que apuntaban a esta posibilidad y que finalmente no se cumplieron.  

Los resultados, muy al principio, no eran halagüeños para el PP. Con sólo el 7% de los votos escrutados, hablaban de 3 diputados para el PSOE, 1 para el PP y otro para Unidos-Podemos. Los nervios no hicieron mella. Los populares estaban convencidos de que lograrían, al menos, los dos escaños alcanzados el 20-D, e incluso de que conseguirían cierta recuperación. Los datos lo confirmaban poco después: al 9,5% del escrutinio, ya apuntaban a dos escaños para el PSOE, otros dos para el PP y uno para Unidos-Podemos. Se refrendaba lo esperado. Sin sorpresas. 

El domingo veraniego invitaba al relax y eso se notó en la tardía afluencia de personas al feudo popular. Mientras, los candidatos en la provincia, encabezados por la ministra de Empleo y cabeza de lista al Congreso por la provincia, Fátima Báñez, se parapetaban en la tercera planta. Faltaba la candidata número uno al Senado, Loles López, que estaba en Sevilla siguiendo la noche electoral. 

Más pendientes de los resultados nacionales y andaluces que de los provinciales, y de si se producía o no el sorpasso, los rostros y las expresiones de los militantes y dirigentes populares onubenses comenzaron a animarse conforme avanzaba la noche y los datos confirmaban que Unidos-Podemos no lograba el crecimiento esperado.  

En torno a las 22:00 se pasaba por la sede popular el que ha sido durante tantos años un bastión del PP en la capital onubense, el ex alcalde Pedro Rodríguez. También comenzaba el goteo de apoderados que, poco a poco, iban tomando la sede. 

Apenas veinte minutos después los comentarios se centraban en el aumento de escaños logrados en Andalucía, tradicional bastión socialista. También en la victoria alcanzada en Huelva capital, especialmente tras el varapalo de las elecciones municipales, en las que los socialistas, encabezados por Gabriel Cruz, lograron terminar con 20 años de gobierno popular. Conforme avanzaba la noche y se confirmaba el ascenso en muchos municipios onubenses -que no se tradujeron en un incremento de diputados- comenzaban las felicitaciones, las risas y los aplausos. Éstos últimos se produjeron, por ejemplo, cuando Pedro Sánchez felicitó en su comparecencia a Mariano Rajoy por la victoria. 

Mientras, los candidatos continuaban arriba siguiendo los resultados. No se esperaba ninguna valoración hasta que no hablara el presidente del Gobierno y líder de los populares, Mariano Rajoy. El silencio reinó en la sede cuando habló la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, para dar paso después a un creciente bullicio fruto de la satisfacción por los resultados.

Como marcaba el guión, las declaraciones de Fátima Báñez llegaron justo después de la intervención de Rajoy. Recibida con un fuerte aplauso y acompañada por el presidente del PP provincial, Manuel Andrés González, y por el número dos al Congreso, Carmelo Romero, Báñez puso voz a la alegría popular ante los resultados cosechados en Huelva, en especial en la capital y en varios municipios importantes de la provincia. "Hemos recortado más de seis puntos al PSOE y subido en 7.000 votos", aseguró satisfecha. "Es un gran resultado", continuó. Tras los agradecimientos a los votantes, apoderados, militantes y voluntarios, insistió en que ahora seguirán trabajando "con todas las ganas y la ilusión por el interés de Huelva y por los grandes retos que tiene". La candidata y ministra culminó con un rotundo mensaje: "Los españoles han votado con claridad que quieren que el proyecto de futuro para España lo encabece el PP".