Recreativo

Pablo Comas se sentará en el banquillo

  • El juez instructor ve indicios de delito en su gestión al frente de la entidad recreativista.

El Trust sienta a Comas en el banquillo. El expropietario y todavía consejero delegado albiazul tendrá que responder por presuntos delitos de apropiación indebida, corrupción en los negocios y delitos societarios, según el auto emitido ayer por el juez instructor de la causa. De esta forma valida la acusación del colectivo onubense, que el pasado mes de marzo inició una causa que ahora se encuentra a las puertas del juicio oral. 

El juez que instruye la querella criminal presentada por el Trust contra Pablo Comas y Gildoy España refrenda las acusaciones del colectivo de aficionados en una denuncia a la que el pasado viernes se sumó el Ayuntamiento como perjudicado. El documento no admite dudas. El juzgado de instrucción número 5 de Huelva ve claros indicios de delito. A Comas le queda ahora el recurso de reforma y la posterior ratificación por parte de la Audiencia Provincial, según fuentes jurídicas consultadas por este diario, aunque todo ello no servirá más que “para ganar tiempo y dilatar el juicio”, señalaron estas fuentes. 

El magistrado señala que Comas “siendo ya presidente del Recreativo en su calidad de administrador único de la mercantil Poientose SL suscribió una póliza de préstamo con garantía personal en la entidad Banco Espírito Santo con fecha 28/11/2012 por importe de 900.000 euros”. En la misma fecha Comas constituyó “una imposición a plazo fijo por 1.000.000 de euros” pertenecientes al club vinculándolo como garantía al pago del préstamo anterior. Como tercera garantía estableció “las nóminas como presidente del Recreativo de Huelva” que fuera a percibir. El crédito resultó impago y, según relata el instructor, se ejecutó como garantía la imposición a plazo fijo del Decano. Comas argumentó que el movimiento buscó evitar el embargo de Hacienda. Sin embargo, el magistrado considera en su auto que “esta operación supone una merma de las arcas del club utilizando dinero perteneciente a la SAD destinado a pagar una deuda particular del investigado en su calidad de administrador de Poientose. Además, el juez detecta “una segunda operación similar” relacionada con el alquiler para su explotación de la tienda oficial de la entidad, si bien este segundo caso también impagado todavía no se ha ejecutado.

Sobre el caso del Tiro Pichón y el gasto de 483.000 euros en el ejercicio 2012/2013 en los estudios para una futura ciudad deportiva, Comas, según el instructor aseguró que “no existe ningún proyecto como tal, pero que se realizaron diversas gestiones con dicha finalidad” aunque “finalmente no se pudo concretar porque el Ayuntamiento no cedió los terrenos que inicialmente iban destinados a tal fin”. En las cuentas anuales siguientes se deduce dicho gasto como compensación con una supuesta deuda del Recre con Gildoy. Según el instructor, en este caso supone “una merma a las arcas del club sin estar debidamente justificada la inversión, sobre todo teniendo en cuenta que el club ya tiene una ciudad deportiva”. El instructor también analiza los movimientos derivados de las salidas de jugadores como Marco Ruben y las cantidades a las que tenía derecho la entidad y que no fueron recibidas en las arcas del club. En cambio, el magistrado “no observa ninguna irregularidad desde el punto de vista penal” en el caso de Javi Álamo. 

Tras analizar todos el procedimiento, el instructor concluye que “los hechos denunciados pudieran ser constitutivos de un presunto delito de apropiación indebida (todos supuestos 253-254 del Código Penal), de corrupción en los negocios (artículo 286 bis del Código Penal) y delitos societarios (artículos 290 y siguientes del Código Penal) imputados a Pablo Comas con la responsabilidad civil de la mercantil Gildoy España”. 

El juez es contundente en sus conclusiones. El magistrado señala que los hechos fueron cometidos por Pablo Comas en su calidad de presidente del Recreativo, habiendo adquirido dicho cargo como administrador único de Gildoy, por lo que deduce que la responsabilidad “penal por la nefasta y perjudicial gestión económica del Real Club Recreativo de Huelva es imputable personalmente a Pablo Comas al no haber actuado con la diligencia debida a un empresario leal” durante su gestión. 

El Trust emitió una nota en la que celebraba el paso dado que supone conseguir “sentar por primera vez en la historia del fútbol en España a un presidente de un club en el banquillo. Nunca antes una asociación de aficionados ha llegado tan lejos en un procedimiento judicial contra un dirigente”.

El éxito es “el resultado del esfuerzo y trabajo constante de esta asociación con el objetivo de proteger al Real Club Recreativo de Huelva. Desde el Trust se quiere dar las gracias a todos sus socios por el apoyo, ya que, recuerdan, el paso de presentar la querella fue dado de un modo democrático en su asamblea con una mayoría abrumadora de votos favorables, y con unas pocas abstenciones, sin ningún voto negativo. 

Las partes tienen ahora 10 días para presentar su correspondiente escrito de acusación solicitando la apertura del juicio oral o el sobreseimiento, sin perjuicio de que puedan solicitar “excepcionalmente la práctica de diligencias complementarias que consideren imprescindibles”. Con que una de las partes presente su escrito de acusación será suficiente. El Trust ya anunció que lo hará y el Ayuntamiento lo anunciará en breve una vez reciba de forma oficial el auto. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios