La primera sentencia dictada en España y ahora confirmada por el Tribunal Supremo contra una célula dedicada a captar yihadistas para enviarlos a Siria e Iraq pone de manifiesto el papel geoestratégico que juega Málaga en las rutas hacia el territorio controlado primero por Al Nusrah, organización terrorista afiliada Al Qaeda, y después por Estado Islámico (ISIS en sus siglas en inglés), también conocida con el acrónimo Daesh. Las investigaciones han puesto al descubierto que la red envió entre abril de 2012 y mayo de 2013 al menos a nueve personas a través del aeropuerto de Málaga. La mayoría de ellos murieron poco después en atentados suicidas, entre los que figuran el ataque a la cárcel de Abu Ghraib en Bagdad (Iraq), que facilitó la huida a un millar de reclusos en julio de 2013.

La sentencia pone de manifiesto que en los primeros meses de 2012 se detectó en Ceuta una célula dedicada a la radicalización de jóvenes a los que enviaba a las zonas de conflicto en Siria e Iraq, que actuaba en conexión con otra red marroquí, en la que participaban yihadistas que habían combatido con anterioridad tanto en Afganistán como en Iraq. Entre ellos figuraba Abdelaziz El Mahdali, ya fallecido, que lideró la brigada o katiba Tariq Ibn Ziad a la que se incorporaron la mayoría de los terroristas enviados por la célula ceutí. El grupo contaba también con Omar El Heddouchi, condenado a 30 años de prisión en Marruecos en 2003 por su implicación en los atentados de Casablanca y liberado gracias a un indulto real en febrero de 2012.

En esos primeros meses de 2012 Mahdali e Ismael Abdelatif Al-Lal se ocuparon de preparar en Turquía la infraestructura para recibir a los yihadistas enviados desde España, así como las rutas para adentrarlos en los territorios ocupados por ISIS.

El primer viaje tuvo en abril de 2012 a través de Málaga. El día 5 de abril uno de los miembros de la red había enviado un correo con la imagen del líder de Al Qaeda en Iraq, Ayman Al Zawahiri y la frase "adelante, oh leones de Sham", con la que daba vía libre a los desplazamientos. El 7 de abril los yihadistas de nacionalidad española y residentes en Ceuta identificados con los alias Wahbi, Pitis y Tafi tomaron el ferry con destino a la península. El día 9 compraron los billetes de avión y el 10, Wahbi, taxista, casado y con hijos, tomó un vuelo con destino a Turquía. El 1 de junio siguiente murió en un atentado suicida al hacer explosionar el camión cargado de explosivos contra un cuartel militar sirio.

El 11 de abril de 2012 viajaron también desde Málaga a Estambul Pitis y Tafo. De este último se sabe que murió el 26 de abril en un atentado con coche bomba contra un puesto de control en Al-Bara (Siria). La ruta desde Málaga se volvió a utilizar el 29 de marzo, fecha en la que fue enviado otro yihadista, así como el 29 de abril, cuando voló hasta Turquía un adolescente de 16 años que supuestamente se integró en la katiba de El Mahdali y del que no se han tenido más noticias.La célula terrorista organizó otro viaje el 31 de mayo de 2013. En esa ocasión envió a cuatro hombres que se integraron en diferentes facciones del ISIS, uno de los cuales, conocido con el alias de Esponja murió en el atentado a la cárcel de Abu Ghraib que permitió la huida de cerca de un millar de reclusos.

La sentencia, dictada en primera instancia por la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional el 30 de septiembre de 2015 y confirmada en su totalidad el pasado 27 de julio por el Tribunal Supremo, recoge que las células de Marruecos y Ceuta enviaron en este periodo "al menos a 28" personas para combatir con las organizaciones terroristas que imperan en los territorios de Siria e Iraq, hasta que fue desarticulada en junio de 2013. La operación policial que dio lugar finalmente a la condena de 11 personas en España, abortó el traslado de otras tres personas que en los días previos a los arrestos trataban de encontrar un vuelo desde Málaga a Turquía tanto a través de agencias de viaje como on line.

Además de esta ruta, también se ha podido comprobar que la red española organizó el traslado de otras cuatro personas desde Madrid y alguno más desde Casablanca.

La posición geoestratégica de Málaga ha sido significativa en los itinerarios seguidos por las organizaciones dedicadas al proselitismo yihadista para enviar combatientes al ISIS. Fuentes consultadas han precisado que en una primera etapa fue posiblemente el punto desde el que partieron más yihadistas, seguida a distancia de Barcelona. A medida que se reforzó el control policial, que ahora esta persona define de "exhaustivo", las organizaciones buscaron otros aeropuertos como los de Lisboa y Oporto, en Portugal. Todos estos emplazamientos en este momento se consideran "quemados", sobre todo desde que Turquía colabora en el control de los pasajeros a raíz del acuerdo firmado con la Unión Europea.

Málaga, por otra parte, también ha resultado relevante en las rutas de la financiación del terrorismo yihadista. La profesora de la Universidad de Málaga y experta del comité antiterrorista del Consejo de Europa, Ana Salinas, señalaba el año pasado en una entrevista con este periódico que la Costa del Sol era un punto de la ruta del tráfico de armas y de drogas que financian el terrorismo yihadista.