Andalucía

No se admiten penes en la cabeza

  • Mojácar prohíbe disfraces "incívicos" en las despedidas de soltero.

"Estamos hartos de conductas vergonzosas, hay que castigar las actitudes que se van de madre". La alcaldesa de Mojácar (Almería), Rosa María Cano (PP), y su equipo de gobierno han decidido poner freno a una estética que consideran feísta y, sobre todo, "incívica". La han detectado de una manera más descarada e intensiva en las fiestas organizadas para despedir a los jóvenes que dejan la soltería y han enfilado el sprint final camino del matrimonio. Los disfraces que acompañan a este tipo de juergas desde hace tiempo no resultan del agrado del gobierno local, que con el respaldo del voto del concejal de Unión Mojaquera sacó adelante en el pleno de ayer la Ordenanza Municipal Reguladora de Convivencia y Prevención de Actos Incívicos.

La norma, con esa etiqueta de relumbrón, viene a prohibir, entre otros comportamientos, que esos grupos que celebran despedidas de soltero por las calles de Mojácar se paseen con "muñecas hinchables" -costumbre muy extendida entre los varones- o adornando sus cabezas "con diademas con penes" -abalorio que ha cosechado éxito entre ellas-. La ordenanza pone el veto a "pasear por la calle con vestimentas, atuendos o disfraces que puedan atentar contra la dignidad de las personas, los sentimientos religiosos o tengan un contenido xenófobo, racista, sexual, sexista, homófobo o que suponga menosprecio hacia cualquier condición o circunstancia personal o social".

Se trata de una normativa polémica desde su aprobación inicial, el 26 de noviembre del pasado año, ya que incluye artículos como la prohibición de "transitar o estar en los espacios públicos, incluidos los transportes e instalaciones públicas, en bañador, salvo en las piscinas, playas y chiringuitos", que para la oposición son medidas que pueden derivar en una "fábrica de destrucción de futuros turistas". Los concejales del PSOE y Somos Mojácar para la Gente votaron en contra de la ordenanza.

Cano defiende las prohibiciones como el resultado de las "numerosas" denuncias recibidas por parte de los vecinos desde hace años. Extraoficialmente, en el nacimiento de esta norma se ve la intención del gobierno municipal de impedir a toda costa que Mojácar se convierta en un "Magaluf almeriense". Sus responsables aseguran que casi todo el texto es una ordenanza tipo que ya funciona en numerosos ayuntamientos españoles.

La alcaldesa dijo que "la ordenanza se aplicará según el sentido común, pues la Policía es suficientemente inteligente para detectar los casos en los que se debe sancionar". La oposición denunció el "afán recaudatorio" y abogó por la educación cívica a la ciudadanía. Cree que "con esta norma los jóvenes se van a sentir desplazados".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios