El eurodiputado de Izquierda Unida, Willy Meyer, y el candidato número uno del partido por Málaga al Parlamento andaluz, José Antonio Castro, rechazaron ayer el modelo de producción "pactado entre el PP y el PSOE" y defendieron un cambio de políticas para evitar que las explotaciones agrarias y ganaderas se sigan "empobreciendo cada vez más".

Ambos dirigentes, que, junto a representantes de las asociaciones ganaderas y agrícolas COAG y UPA, repartieron hortalizas en la calle Larios, advirtieron de que la situación "complicada" que atraviesa el sector se debe a la Política Agraria Común (PAC). 

En este sentido, lamentaron "la dificultad de hacer frente a la actividad por la poca capacidad de intervenir en las decisiones que se están tomando y sobre todo en los injusto precios". Aludieron el efecto negativo del acuerdo agrario entre la Unión Europea y Marruecos, "que supone la puntilla a nuestro sector agrícola". La modificación que defiende la coalición pasa por apoyar la producción, que desde los servicios públicos se pueda intervenir la economía con una política fiscal diferente para que "el que más tiene más pague, más contribuya", así como rescatar sectores estratégicos de producción como la banca, la siderurgia, las telecomunicaciones o el sector naval.

Castro abogó por hacer una apuesta "decidida" por la agricultura ecológica y que se promueva los canales cortos de comercialización, "de manera que tengamos mercados locales y comarcales de productores agrícolas y ganaderos de nuestra provincia". "El Valle del Guadalhorce, la Serranía de Ronda, la Vega de Antequera y la Axarquía pueden ser despensas naturales de nuestra provincia", dijo.