La familia de las víctimas del doble crimen de Almonte recurrirán ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) la sentencia que absolverá a Francisco Javier Medina, único acusado del caso, cuando les sea notificada. Así lo anunciaron ayer Gustavo Arduán e Inmaculada Torres, los letrados de la acusación particular, que comparecieron en el Colegio de Abogados con Aníbal Domínguez, hermano y tío de las víctimas, Miguel Ángel Domínguez y su hija María Domínguez. Los abogados valoraron "como una auténtica chapuzaba motivación expuesta por el jurado popular, que defendió la no culpabilidad de Medina que se tradujo en su inmediata puesta en libertad.

Inmaculada Torres, letrada de Marianela Olmedo -madre y esposa de las víctimas-, entiende que la valoración de la prueba practicada en el acto del juicio por el jurado popular "está falta de sentido, es absurda, sin la más mínima coherencia". Apreció en este sentido que el veredicto se sustenta "en dos testificales de la defensa", en la de la ex novia de Medina, Raquel Granado, y una compañera de trabajo, Maite Espina.

Lamentó la jurista que no se haya dado credibilidad al testimonio de su representada, "quien sufre depresión pero se expresa con claridad y coherencia", en lo concerniente al lavado de las toallas pero sí en que ella ubicara a Medina fuera del supermercado cuando hablaron por teléfono, a las 22:09 de aquel 27 de octubre de 2013. Torres agregó que no es de recibo que no se hayan tenido en cuenta pruebas de cargo tan contundentes como la del ADN o a testigos clave como los caballistas, quienes declararon haber visto al ya exculpado fuera de su lugar de trabajo en horario laboral. Por ello considera que el TSJA "tendrá que declarar la nulidad del juicio". Esto, eso sí, obligaría a la repetición del plenario. De nuevo con jurado popular, pero con una nueva selección de ciudadanos.

Gustavo Arduán, que representa legalmente a la familia Domínguez Espinosa, también lo tiene claro: "La motivación del veredicto es insuficiente". A su juicio, el jurado "llega a una conclusión por arriba -refiriéndose a que creen que no pudo cometer los crímenes por una cuestión temporal- y después la rellena con los elementos adecuados que más a mano tiene", caso de testificales como la de la ex pareja de Medina, explicó. Arduán añadió que no se ha dado respuesta "a las complejas cuestiones planteadas" en la vista oral y que "deberían haber ahondado más en las pruebas que se practicaron".

El letrado ve, por tanto, factible que prosperen los recursos ante el TSJA y afirma que "no nos cabe duda" de que la Fiscalía les apoyará en la iniciativa. Según sus cálculos, el alto tribunal andaluz podría resolver el asunto en un plazo de tres meses, a lo sumo.

Aníbal Domínguez, por su parte, evidenció el "sentimiento de desasosiego, desprotección y miedo" que padecen los familiares de los fallecidos, porque tras el veredicto "sólo existe una certeza: el asesino está en la calle, conoce a las víctimas y a sus familiares, es un cobarde que planifica fríamente, que entra en las casas por la noche y que ataca sin piedad por la espalda; no tiene escrúpulos, fue capaz de asestar más de 100 puñaladas a una criatura de 8 años"