La presidenta andaluza y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, ha dicho que no comparte con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el optimismo sobre la situación económica, y que éste no la va a convencer de que se ha salido de la crisis "porque no es verdad". "Es verdad que hemos tocado pero no sé cuánto tiempo nos vamos a arrastrar por el fondo", ha señalado Díaz en una entrevista con la cadena SER, en la que ha tachado de atropello que se le exija a Andalucía la devolución de 426 millones de euros del fondo de convergencia, cantidad sobre la que ha mostrado su oposición a devolverla.

Del presupuesto de la Junta para 2015 ha asegurado que "devuelve derechos a los empleados públicos" e incrementa las partidas para empleo, sanidad, educación y dependencia, aunque aún no es el presupuesto que ella desea y que "Andalucía necesita". Sobre su demanda de un nuevo sistema de financiación ha dicho que "ahora que nos envolvemos todos en la Constitución, incluso los que no la votaron o la votaron porque no tenían más remedio, es el momento de defenderla con hechos" propiciando un sistema de financiación que permita los mismos servicios para todos los ciudadanos.

De la posible reforma constitucional, Díaz ha señalado que "hay que reformar el 78 para que siga siendo útil, pero no cargárselo" y que le preocupa que "hablen de cargarse el candado del 78, que dio libertad e igualdad a muchos ciudadanos de este país". Sobre Podemos ha señalado que, al no concurrir a las municipales, "está demostrando que no tiene compromiso con los pueblos y con las ciudades y que sólo le interesa el poder en España" y ha añadido que Podemos genera "incertidumbre y desconfianza" porque "nunca dice con claridad lo que defiende más allá de la retórica que en estos momentos suena bien a los ciudadanos".

Prevé que el paro bajará en Andalucía "de manera sostenida" a partir de abril

Preguntada sobre cuándo va a bajar Andalucía de la cifra del millón de parados, ha considerado que eso ocurrirá "pronto", si bien ha apuntado que el paro bajará de "manera sostenida" a partir del próximo mes de abril. Para Díaz, en los próximos meses, probablemente, "estemos ya por debajo de esa barrera psicológica del millón de parados, pero cuando empezaremos a ir notando ese crecimiento del empleo por encima de la media de España será fundamentalmente en abril y ya sostenido en el tiempo en los siguientes meses".

La presidenta ha reiterado que lleva quince meses pidiendo al Gobierno central un plan especial de empleo en esta comunidad, como han tenido Canarias o Extremadura. Ha manifestado que es de derecho y que Andalucía, con esta tasa "insoportable" de paro, necesita la ayuda de todos. Ha lamentado que ello no haya sido posible, de manera que ahora no va a desaprovechar "la oportunidad" que representa el plan de inversiones de la UE, planteado por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, "que puede darnos una oportunidad para recortar el diferencial crónico" que tiene Andalucía con España y con Europa, fruto, entre otras cosas, de la falta de un tejido industrial potente, una situación que, en una crisis como esta, dispara la tasa de desempleo. "Donde haya una posibilidad de inversión para Andalucía y de programas que generen empleo y riqueza, ahí voy a estar yo pidiendo lo que corresponda a nuestra tierra y lo que necesite", ha sentenciado Susana Díaz.

"No cambiará" su Gobierno porque se lo diga IULV-CA, a la que demanda "lealtad"

Díaz ha querido dejar claro que no cambiará su Gobierno porque se lo diga IULV-CA, formación a la que ha pedido "lealtad", y que no va a admitir que su Ejecutivo tenga "fecha de caducidad". Susana Díaz ha manifestado que no tiene previsto cambiar su actual Gobierno porque es el que necesita Andalucía en un momento muy difícil y complicado. "Ha sido un año muy duro y creo que este Gobierno ha demostrado que otra política y otra relación con los ciudadanos es posible y que se pueden hacer las cosas mejor", ha señalado.

En cuanto al hecho de que el coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, no haya descartado entrar en el Gobierno andaluz si se lo pedía su formación, ha señalado que ella no va a cambiar el Gobierno porque se "lo diga una fuerza política". Ha insistido en que su Gobierno es fruto del acuerdo por Andalucía que firmaron PSOE-A e IULV-CA tras las últimas elecciones autonómicas, pero, a partir de ahí, "no puede estar sujeto a las cuestiones internas de las distintas fuerzas políticas". "Tiene una hoja de ruta, que es el acuerdo por Andalucía, que yo comparto, que creo que es bueno para los ciudadanos y creo que se puede cumplir íntegramente", ha señalado la presidenta.       

Preguntada sobre si cree que IU-CA tiene algún interés en romper el pacto de gobierno, ha manifestado que no sabe el interés que tiene o deja de tener Izquierda Unida, pero lo que quiere ella es "lealtad". "Quiero lealtad con el Gobierno del que forman parte, quiero responsabilidad con los andaluces, que no pueden estar sujetos a los líos internos de los partidos, y quiero también la madurez de saber poner en valor lo que ha hecho este Gobierno para nueve millones de personas", según ha sentenciado Susana Díaz. Ha manifestado que son esos los tres elementos que pide a IU-CA y que espera que esa formación sea consciente de la necesidad de estabilidad por parte del Gobierno.

De otro lado, en cuanto a la lucha contra la corrupción, Díaz, que ha señalado que va a ser respetuosa con lo que haga y diga la justicia, ha manifestado que tiene claro lo que tiene que hacer su Gobierno, "abrir puertas y ventanas" y "descolgarlas directamente", porque la gente tiene derecho a confiar en sus instituciones y para que ello sea posible se necesita mucha transparencia y conocer cómo se gasta hasta el último euro público. "Eso es lo que le va a achicar el espacio a los corruptos", ha indicado Díaz, apuntando que quiere que se levanten tranquilos todos los responsables públicos honestos en Andalucía. Asimismo, ha señalado que le duele que España aparezca como un país "enfermo", cuando hay gente honesta y trabajadora que se levanta todos los días para levantar su casa, su empresa y su país y no merece desayunarse un caso de corrupción tras otro ni acostumbrarnos a que esos casos son "inevitables" porque se pueden evitar.